L'Atelier, en francés estudio, es el reducto más íntimo de los artistas. Un lugar de creación al que acceden las personas más próximas al artista con un simple fin: disfrutar del arte.
Escogí este nombre porque reflejaba la esencia que quería transmitir al blog. La seducción puede analizarse de muchas maneras y yo buscaba darle un enfoque artístico.
Con L'Atelier pretendo un modelo de seducción emocional, natural y en femenino. Emocional porque prefiero hablar del seductor como un artista que como un ciéntifico. No niego que la seducción pueda ser una ciencia, sencillamente me estimula más verla como el arte de estimular a las mujeres. Natural porque es esa la escuela a la que pertenezco. Una escuela que me enseña a mejorar en mis habilidades sociales en lugar de trucos quasi-esotéricos para engañar a las mujeres. Y en femenino porque a mi lo que me importa es la mujer y su mundo. Los gurús y sus guerras no ocupan espacio en mi vida.

sábado, 2 de febrero de 2008

Confort y seducción I: La zona de confort.


Britney Spears antes de instalarse a vivir en la zona de confort

Inicio hoy una serie de artículos sobre el confort y la seducción. Comenzaré con el confort como enemigo, con lo que no debes hacer nunca: caer en la zona de confort.

¿Qué es la zona de confort?

Por zona de confort me refiero a todos esos casos en los que llega el momento de dar un paso, de escalar en la relación y lo vas paulatinamente retrasando.

Abordar, mostrar interés, cerrar, etc. Todas estas jugadas implican un riesgo. Es llegar a la hora del examen. El momento en el que se verá si lo has hecho bien. Es el point of no return. O triunfo o fracaso.

Antes este dilema muchos optan por retrasar el momento. Necesito una copa para abordar a una mujer así, ese tipo de al lado seguro que es su novio, primero voy a proyectar más valor y más blah, blah aderezado de neologismos.

¡Game over!

Muchachito para cuando quieras mover ficha será demasiado tarde.

Si alguna vez tienes la sensación de que es el momento de hacer algo. Es el momento. ¡Hazlo!

Oirás una diabólica voz que te da razones para retrasar la jugada. Ignorala.

Siempre hay una razón para no hacer las cosas.

Siempre tendrás que tomar un riesgo.

Siempre hay una posibilidad de fracasar.

La certeza total no existe.

Nunca estarás seguro al 100% de que vas a enganchar el set, de que la chica va seguir contigo cuando muestres interés sexual, de que te vaya a besar... Aún así es algo que tienes que hacer.

En una ocasión me hablaron de los dos mejores brokers de Nueva York. Uno era un tipo que daba mil ordenes por segundo, el típico que está colgado del teléfono repitiendo compra, vende. El otro daba sólo un par de órdenes al día.

Dos métodos completamente distintos que tenían un punto en común: los dos arriesgaban siempre. Comentaban que en la Bolsa nunca estás seguro de que la inversión vaya a salir bien. En la Bolsa no puedes esperar a estar seguro al 100% de que tu movimiento será el bueno, para entonces era demasiado tarde. Siempre que habían esperado a estar completamente seguros habían perdido. Si quieres ganar tienes que haber actuado antes. Invertir en Bolsa se trata de aprender a convivir con la incertidumbre, a fiarte de tus instintos y, en último término, asumir que la jugada ha salido mal y que has perdido dinero.

Exactamente lo mismo sucede en la seducción. Siempre hay riesgos. Sencillamente es algo que asumes y mueves ficha. Sabes que te la estas jugando, pero te da igual porque es parte del juego. Esperar a que desaparezca el riesgo es como pretender que en el fútbol te llegue el arbitro y te diga: durante el resto del partido podéis tocar el balón con las manos.

Así que si tienes la sensación de que es el momento de actuar, actúa. ¿Qué no estás seguro? nunca lo estarás. ¿Qué hay riesgos? siempre los habrá.

Si dudas si avanzar, no te engañes, no es que haya un motivo para no dar un paso adelante. Es que tienes miedo. Avanza

Al día siguiente, cuando te despiertes ¿Qué te dolerá más? Haber fracasado o no haberlo intentado.

Just do it

En este capítulo hemos aprendido a tomar riesgos, a sufir, en el próximo hablaré de cómo disfrutar de los riesgos y superar el fracaso. Así que:

CONTINUARÁ...

Un abrazo, Mario di Domenico.

Amy Winehouse hace un pedazo de canción de su negativa a ir a rehabilitación. La zona de confort es tan cómoda que es muy puto salir de ella.

1 comentario:

Anónimo dijo...

thks men, te he estado siguiendo en silencion y este articulo ya pasado me ha servido para recordas ciertas cosas